Otro Otoño seco en Andalucía, y ya a mediados de Enero ardíamos en deseo de hacer otra invernal y como no, se nos vino a la mente Sierra Nevada, la Madonna de nuestras Montañas del Sur, en esta ocasión decidimos subir al Veleta 3.395 metros y al Cerro de los Machos, la verdad no se a que viene este calificativo de "Cerro", ya que tiene una altitud de 3.340 metros, "ahí es na"
La partida estaba compuesta por cinco amigos del Club de Montaña Sierra Sur, Juan (Rechola), el Alma Mater de la expedición, Susana, su incansable compañera, Rosa, como siempre, pletórica de energía, Pedro, mi compañero de sufrimiento cuando la cuesta pica para arriba y un servidor Antonio (Zerimar).
Era un frío Sábado de Enero a las cinco de la mañana, cargábamos el equipo en el coche con el cuerpo cortado y aún impregnado del dulce calor de la cama que se nos diluía poco a poco dejando pasar el nerviosismo y la euforia que transmite la aventura en los incipientes compases del día.
Salimos de Morón y cuando por fin llegamos a Granada, el veleta nos muestra su inconfundible perfil erecto y desafiante, cubierto por un manto de nieves robadas al azul celeste aún a pesar del cambio climático, para ofrecernos una ruta cargada de hielo, nieve, frío y viento poniendo a prueba a los hombres y al equipo.
Como todos sabemos y el que no lo sepa seguro que lo aprende a la primera, en la montaña nada es regalado, hay que sudarlo.
Como todos sabemos y el que no lo sepa seguro que lo aprende a la primera, en la montaña nada es regalado, hay que sudarlo.
Comenzamos a las nueve de la mañana desde el aparcamiento del Albergue Hoya de la Mora 2.552 mt, un fuerte viento nos envuelve con su helor y nos ponía en aviso de lo que nos esperaba a lo largo del día.
Comenzamos la subida y entramos en calor rápidamente, ya que ésta pica hacia arriba si cesar en un camino que no por ser habitual, se sube sin esfuerzo.
Pronto pisamos nieve y la ausencia de precipitaciones y las bajas temperaturas propiciaban la formación de hielo, teniendo que realizar casi toda la travesía con los crampones, o como los llama nuestra amiga Rosa "Pezuñas de Acero" que fueron protagonistas al menos durante la subida, ya que me había comprado unos crampones semiautomáticos el día anterior y por desconocimiento o bien por error del vendedor, me adjudicó unos crampones automáticos y por supuesto no iban bien, se soltaron siete veces en la subida más una con peligrosa caída incluida bajando al refugio de la Carihuela.
Para los que no que crean en la suerte, aquí una muestra, porque la verdad, no se como iba a bajar.
Hablando, hablando con unos montañeros de Alicante nos metimos de trato, él se quedó con mis crampones automáticos y yo con los suyos que eran semiautomáticos y que según decía, habían estado en el Himalaya y seria verdad porque no tenia comparación, cuando me los coloqué efectivamente eran unas verdaderas "Pezuñas de Acero".
Estaba escrito teníamos que subir a casi tres mil cuatrocientos metros para encontrar nuestras Pezuñas...., estaba escrito.
Desde aquí les doy las gracias a estos chicos que me solventaron un problema que pudo ir a mayores.
Durante un tramo de la ascensión fuimos escoltados por un destacamento de zapadores de montaña del glorioso ejercito nacional, decir que no es guapa la foto....
Aqui tenemos a Pedro peleando con lo que hay que pelear, es que de toda la vida, las subidas son en Zing Zag y no to tieso.
Bueno, sin palabras, aquí tenemos a las dos guapas, Susana y Rosa, ?no las veis un poco cansadas¿. Fijaros bien.
Están más fuertes que el vinagre.
Bonita foto de Antonio con la cara norte del Veleta de fondo. Es lo que tiene ser fotogénico.
Juan en las Posiciones del Veleta , un collado con una panorámica sobre el barranco de San Juan y los Corrales del Veleta realmente espectaculares (se llaman posiciones porque hubo unas posiciones militares, creo que de la zona Republicana durante la guerra civil).
Seguimos subiendo y paso a paso vamos obteniendo nuestra recompensa, las maravillosas vistas marca de la casa.
Por fin se adivina la cima y las chicas comienzan a acelerar su ritmo..., mira la zancada de Rosa, sin comentarios.
Y por fin la cumbre, parece que hay alguien ahí arriba.
¡Coño! si son Susana y Rosa.
¿habrán subido en el tele cilla?.
Pues va a ser que no.
Como en una foto no salimos los cinco, ahí van dos...
En la primera: Juan, Pedro, Antonio y Susana.
En la Segunda: Rosa, Pedro, Antonio y Susana.
Pues bien, el placer de lograr la cima en el Veleta duró poco, el viento de 20 kilómetros por hora y las bajas temperaturas, según las previsiones meteorológicas de -8º C. con sensación térmica de -18º C. nos hicieron ponernos en marcha dirección al refugio de la Carihuela.
Antonio en su calvario particular de ocho estaciones, quita crampones, ajusta crampones, pon crampones, quita........
Rosa, Pedro y Susana en el Refugio de la Carihuela 3.205 metros, este es un lugar histórico para alguno, ya que aquí fue donde se cerró el trato de las "Pezuñas de Acero".
Cara Sur del Veleta desde la Carihuela, a su derecha el Cerro de los Machos, que por falta de tiempo decidimos no subir y dejarlo pendiente para otro día, ¡¡Volveremos!!.
Partimos de regreso, el viento nos daba de cara y el frío era insoportable, aún con todo cubierto creía que perdía la napia.
Ahora, posando para la foto.
?O no se nota.....¿
Hielo, hielo y más......
Bien, como vereis, ésta es la fotografía del principio, realmente es la del final de la travesía, eran sobre las cuatro de la tarde, pero quedaba bonita al principio y también la coloqué allí.
En definitiva, un gran día haciendo lo que nos gusta y con la gente que nos gusta, aunque echáramos de menos a algunos amigos que en esta ocasión no pudieron acompañarnos.
Habrá más......
Para los que no que crean en la suerte, aquí una muestra, porque la verdad, no se como iba a bajar.
Hablando, hablando con unos montañeros de Alicante nos metimos de trato, él se quedó con mis crampones automáticos y yo con los suyos que eran semiautomáticos y que según decía, habían estado en el Himalaya y seria verdad porque no tenia comparación, cuando me los coloqué efectivamente eran unas verdaderas "Pezuñas de Acero".
Estaba escrito teníamos que subir a casi tres mil cuatrocientos metros para encontrar nuestras Pezuñas...., estaba escrito.
Desde aquí les doy las gracias a estos chicos que me solventaron un problema que pudo ir a mayores.
Durante un tramo de la ascensión fuimos escoltados por un destacamento de zapadores de montaña del glorioso ejercito nacional, decir que no es guapa la foto....
Aqui tenemos a Pedro peleando con lo que hay que pelear, es que de toda la vida, las subidas son en Zing Zag y no to tieso.
Bueno, sin palabras, aquí tenemos a las dos guapas, Susana y Rosa, ?no las veis un poco cansadas¿. Fijaros bien.
Están más fuertes que el vinagre.
Bonita foto de Antonio con la cara norte del Veleta de fondo. Es lo que tiene ser fotogénico.
Juan en las Posiciones del Veleta , un collado con una panorámica sobre el barranco de San Juan y los Corrales del Veleta realmente espectaculares (se llaman posiciones porque hubo unas posiciones militares, creo que de la zona Republicana durante la guerra civil).
Seguimos subiendo y paso a paso vamos obteniendo nuestra recompensa, las maravillosas vistas marca de la casa.
Por fin se adivina la cima y las chicas comienzan a acelerar su ritmo..., mira la zancada de Rosa, sin comentarios.
Y por fin la cumbre, parece que hay alguien ahí arriba.
¡Coño! si son Susana y Rosa.
¿habrán subido en el tele cilla?.
Pues va a ser que no.
Como en una foto no salimos los cinco, ahí van dos...
En la primera: Juan, Pedro, Antonio y Susana.
En la Segunda: Rosa, Pedro, Antonio y Susana.
Pues bien, el placer de lograr la cima en el Veleta duró poco, el viento de 20 kilómetros por hora y las bajas temperaturas, según las previsiones meteorológicas de -8º C. con sensación térmica de -18º C. nos hicieron ponernos en marcha dirección al refugio de la Carihuela.
Antonio en su calvario particular de ocho estaciones, quita crampones, ajusta crampones, pon crampones, quita........
Rosa, Pedro y Susana en el Refugio de la Carihuela 3.205 metros, este es un lugar histórico para alguno, ya que aquí fue donde se cerró el trato de las "Pezuñas de Acero".
Cara Sur del Veleta desde la Carihuela, a su derecha el Cerro de los Machos, que por falta de tiempo decidimos no subir y dejarlo pendiente para otro día, ¡¡Volveremos!!.
Partimos de regreso, el viento nos daba de cara y el frío era insoportable, aún con todo cubierto creía que perdía la napia.
Ahora, posando para la foto.
?O no se nota.....¿
Hielo, hielo y más......
Bien, como vereis, ésta es la fotografía del principio, realmente es la del final de la travesía, eran sobre las cuatro de la tarde, pero quedaba bonita al principio y también la coloqué allí.
En definitiva, un gran día haciendo lo que nos gusta y con la gente que nos gusta, aunque echáramos de menos a algunos amigos que en esta ocasión no pudieron acompañarnos.
Habrá más......
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